Enero es sinónimo de inicio, de principio de algo; pero también de fin de algo. Pasadas las fiestas familiares, es momento de aligerar los días y la alimentación es el modo ideal para hacerlo.
Fin de los excesos, verdura para equilibrar los «sesos».
En ese camino para vegetalizar nuestro recetario, pensamos que este plato es perfecto para añadir una referencia más a la lista. Si bien las espinacas son una de las verduras más olvidadas como odiadas por muchos, su sabor es profundamente terrenal. Maravillosamente delicado.
Dadle una oportunidad. ¡Salud!
–
comida
1 manojo de espinacas frescas / 2 patatas / pimienta negra recién molida / sal en escamas / aceite de oliva
1 – Pelamos, limpiamos y cortamos las patatas a dados. Las ponemos a cocer con agua hirviendo con sal.
2 – Limpiamos las hojas de espinacas y las escaldamos unos 3-5 minutos en agua hirviendo con sal. Dejamos escurriendo.
3 – Servimos perfectamente aliñado.
y siesta
4 – Fin de fiesta.